ESTRATEGIAS PARA VIVIR UNA SEXUALIDAD MUY PLACENTERA[1]
Todos tenemos relaciones sexuales más de alguna vez en la vida. Todos, sin excepción, somos producto de la sexualidad de nuestros padres, haya sido o no placentera. Sin embargo, pocas personas en el mundo se preparan para disfrutar de su vida sexual con plenitud.
Tener relaciones sexuales, coger, echar un brinco, follar, echar pata, un rapidín, hacer el amor, tener intimidad, cohabitar, cenar Pancho, son solo algunas de las expresiones usadas para referirse al hecho de tener relacione sexuales. Hacerlo no es mayor problema, la dificultad esta en tenerlas con placer mutuo, de manera que se incremente el deseo de volver a repetir la experiencia.
Para que las relaciones sexuales resulten gratificantes y surja el deseo de repetirlas con frecuencia, es menester tener algunas estrategias, que implican cierto conocimiento de cómo funciona la sexualidad propia y la de la pareja sexual. Es importante tener ciertos conocimientos básicos de cómo está formado el cuerpo propio y el del partenaire, saber del mecanismo de la respuesta sexual humana y, sobre todo, conocer los gustos y preferencias de la parte con la que nos involucramos en la cama. Para ello es imprescindible tener una buena comunicación, que facilite la expresión del deseo y de los gustos en la intimidad, pues de otra manera, difícilmente adivinaremos qué es lo que realmente le agrada o disgusta a nuestra pareja, si no lo decimos, ella no sabrá qué es lo que nos agrada más y qué es lo que nos deja impávidos, por más esfuerzos y/o movimientos que haga la pareja.
El arreglo personal y la higiene corporal son dos factores fundamentales para estimular el deseo en el otro (a), además de la actitud y disposición que se muestre para el cortejo y la seducción. Para ir a la cama se necesitan dos, uno solo, únicamente provocara placer auto erótico o la satisfacción propia, pero la frustración de la otra parte.
Una vez que se está en la disposición para tener la experiencia sexual, el arreglo del espacio físico en donde se dará el encuentro será parte del éxito de la experiencia. El juego previo, los olores, los sonidos, el espacio, la iluminación, el gusto, son elementos importantes que influyen en el éxito de la experiencia sexual.
Para coger bien, hay que ir con ganas y provocar el deseo de la otra parte. Esto se facilita si se ha considerado la preparación personal, la del lugar y si se está en disposición de seducir al compañero sexual. Una vez iniciada la experiencia, es muy importante concentrarse en la tarea, apagar el celular, asegurar el lugar, para que no haya visitas inesperadas, concentrarse en el inter juego de caricias, besos y exploración del cuerpo propio y de la pareja.
Compartir las fantasías y realizar juegos eróticos son estrategias que enriquecen la vida sexual de las parejas. El uso de juguetes sexuales, cambiar de lugar: cocina, sala, patio, baño de la casa, puede ayudar a incrementar el deseo. Hacer juegos de roles: ella es la enfermera, la estudiante de preparatoria, la secretaria o la prima de él. Por su parte, él puede ser el bombero, el policía, el Dr. o el maestro.
Utilizar perfumes, aceites de olores agradables y tomar un poco de vino, son otras de las estrategias que facilitan que las relaciones sexuales sean más placenteras, menos rutinarias y mucho más exitosas.
Es bueno coger o hacer el amor, pero es mejor cuando se hace muy bien y ambos quedan gratamente satisfechos.
[1] Artículo escrito por el Dr. Marco Antonio Pérez Mora para el programa de radio El Expresso de las diez de Radio Universidad de Guadalaja